miércoles, enero 12, 2005

Dios ha muerto el 26D

Se ha hablado mucho del Tsunami. La gran catástrofe humanitaria que ha sido y todas esas cosas. Pero nadie se da cuenta de la simbología del suceso. Ocurrió un 26 de diciembre. Justo tras celebrar la Navidad. Aunque allí no son mayoría, bastantes son los cristianos que habitan. Les pilló celebrando el nacimiento. Para mí esta catástrofe demuestra más que nunca que Diós no es amor. Unos dirán que nos pone a prueba. ¡Qué tontería! Los otros, que creó el mundo y se desentendió. Bien, pero eso es incompatible con lo que nos dice la iglesia de que Diós vela por nosotros. El primer razonamiento tras lo ocurrido es que por lo menos Diós PASA de nosotros.


Pero podemos ir más allá. Los griegos entendieron esto muy bien. Sabían que en cualquier momento podían morir por la furia de uno de sus volcanes o bajo los escombros de su casa derrumbada por un terremoto. Entendieron que sus dioses eran caprichosos. Ni buenos ni malos ya que unas veces les perjudicaban y otras les beneficiaban. Para sus dioses los humanos eran poca cosa, como mucho un juguete con el que divertirse. Desde un punto de vista razonado tal conclusión es mucho más lógica que la del dios misericordioso. Por eso digo que Diós ha muerto. Pero no cualquier dios, ha muerto Diós. El Diós cristiano benevolente y complaciente. Ese dios todo amor. Eso es irreal pues, ¿como iba a permitir que tras conmemorar su nacimiento se produjera tal catástrofe? Me creo más a la versión de la mitología griega. Ellos dirían que han sido los titanes tratando de salir del tártaro, está clarísimo.

Zaratustra habló y dijo: Siempre hay que desconfiar de las cosas que son solo buenas o solo malas. Mi palabra es que no existe el mal ni el bien absolutos. De todo lo que se presente como absoluto desconfiad. No hay conocimiento, ni moral, ni nada que sea absoluto. Ni siquiera el universo es absoluto. Por ello desconfío y reniego de ese Diós absoluto pues Diós ha muerto definitivamente el 26 de diciembre.

Los temblores de tierra se han relacionado siempre con el submundo y, más concretamente, con el fuego. Se sabe que muchos temblores iban asociados a erupciones y por ello se dijo que provenían de allí y que a veces escapaba fuego. Pero a mí me gusta más una historia oriental en especial. Os la cuento. Decían algunos chinos que dentro de la Tierra habita un dragón enorme. Un dragón dormido, por fortuna. Pero a veces se movía. Y cuando esto ocurría se producían los temblores. Cuando resoplaba y expulsaba su abrasador aliento entonces la Tierra escupía fuego. El mito es francamente bonito y explica de una forma muy simple y elegante estos fenómenos. Hablando de dragones, ¿alguien se ha preguntado porque son tan parecidos y han surgido en culturas tan diferentes como la europea, la oriental e incluso la amérindia? Muy sencillo, en todas partes del globo hay fósiles de dinosaurios y es en ellos en los que se inspiraron nuestros antepasados para crear hydras, dragones y otras criaturas mitológicas.

La gran conclusión de esta catástrofe es que Diós no les salvó ni les podría haber salvado. Sin embargo la ciencia humana sí podría haberlo hecho. Los hombres mismos podrían haber hecho lo que un dios todopoderoso y benevolente no puede hacer. ¿Qué Diós es ese? Nadie estaba realmente preparado para un tsunami de esa magnitud y más en la región del índico pero de haberlo estado los muertos de Somalia, Sri Lanka, la India y probablemente los de Tailandia podrían haberse evitado.

Mirando videos de aficionados, sobretodo turistas, hice otra reflexión curiosa que no se ha oído mucho. Por lo menos da que pensar. Tras el desastre yacen muertos cuerpos blancos y morenos vagan desconcertados blancos y morenos y se lamentan de sus heridas blancos y morenos. Todos por igual. Todos con cuatro trapos, magullados, aturdidos. El caso de Tailandia es el más exagerado, la mitad de los muertos eran turistas. Y no turistas cualquiera. Eran turistas de lujo. Y fue ese lujo justamente su perdición. Pagaban por estar en islas paradisíacas, lejos de la multitud, cerca de la costa, en un edén de arena y mar. Pero la ola convirtió su paraíso en infierno y los que minutos antes eran los más dichosos de repente pasaban a ser los más expuestos a la furia del tsunami. Desprotegidos y sin posibilidad de escapar serían los primeros en recibir. Solo así puede explicarse la elevada tasa de turistas muertos en ese país, Tailandia. País al que seguramente muchos fueron para algo más que unos días de playa.

Por todo eso Zaratustra convino en afirmar: Ni lo material ni lo sentimental ni nada que puedas tener puede salvarte de la muerte. Puede alargarse el final pero seas rico o pobre llegarás al final. Y si la Tierra decide que hoy es tu día nada ni nadie podrá hacer nada para detenerlo pues solo eres una insignificancia para la Tierra como ésta lo es para el universo.

Para ver videos del tsunami tenéis los más destacados en http://www.asiantsunamivideos.com/ o esta página que contiene esos mismos videos y muchos más http://www.waveofdestruction.org/videos/

Para saber más sobre tsunamis y fenómenos tectónicos podéis mirar en:
http://es.wikipedia.org/wiki/Tsunami
http://www.puc.cl/sw_educ/geo_mar/html/h712.html
http://es.wikipedia.org/wiki/Tectónica_de_placas

1 Comments:

Anonymous Anónimo said...

Si contásemos con "dios" como un elemento místico, mitológico, de la sociedad de todos los tiempos, empezaríamos a descubrir realidades que nos conducirían a planteamientos prácticos y dejaríamos de volcar nuestra "fe" en seres mitológicos o entes abstractos, como el destino, cogiendo la reponsabilidad de nuestros actos y siendo concientes de los factores que realmente afectan nuestro futuro, que no son menos aleatorios que un dios, pero son más reales.

14:54  

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